MEXICANOS AL GRITO DE GUERRA

Así es mis queridos compatriotas naturalitos o de importación, estamos todos aquí reunidos para leer la santa palabra de la obviedad y asimilar lo que todos (espero), tenemos en nuestra base de datos cerebral y que si "ya me lo sabía" o "siempre me lo dicen", nunca nos acordamos, o simplemente nos pasa de largo.


Entonces te pregunto: TÚ, sí TÚ, que eres de los 1000-8000 o maderista o darks anti-religioso o simplemente ni tú te entiendes y no sabes lo que eres, ¿en verdad haces algo por tu país?

  Ok a lo mejor te sabes (o medio sabes) el himno nacional, ¡pues claro!, eres parte de una "cultura" pambolera y dicho himno lo ponen por lo menos al inicio de cada partido importante  de catego internacional. Pero no es suficiente chato, en verdad hay personas que siguen o participan en religiones, tradiciones, modas, movimientos o eventos sociales de una manera responsable y dentro de las normas; sin embargo, también existen los amigos comprados, corruptos o gandules, que pueden ser desde el mismísimo líder u organizador hasta el que tiene cara de más menso, mismos que apestan todo cuando ya alborotaron al pueblo y friegan la vida de bastantes. Por otro lado, tenemos a la mayoría de participantes o "borregada", que ni saben bien de qué ritmo se baila, cómo va la letra o quién dirige a la orquesta, pero ellos pertenecen y se sienten bien identificados con algo que no conocen. Ahora, si eres abstemio y te da hueva ir, o simplemente (aunque estás bien informado) prefieres hacer otras cosas, o ni te importa: también tienes qué preguntarte si en verdad estás haciendo algo por tu país.

Asimismo hay quien, desapercibidamente, hace lo que tiene qué hacer y ya, siempre cuidando en lo posible los valores que le han inculcado para ser una persona de bien y tener un espacio en la sociedad. Hay como éstos algunos tipos más de personas en nuestra sociedad, pero no es el tema a tratar y creo que con esto la idea de por dónde va la cosa está mas próxima a vislumbrarse.

Bueno, vámonos concretando el blanco de esta publicación, los estudiantes. Una de las potencialidades de cualquier país son sus jóvenes (y no tan jóvenes) estudiantes. Tenemos la clase de estudiante que va a ligar, chismear, contar chistes (la clásica botarga), ser secretario de los demás, ser el asistente del secretario, los inadaptados o antisociales, etc., etc., y los que van a aprender (que ciertamente tienen características similares a los anteriores, pero deciden hacer las cosas bien).

Unas características del estereotipado estudiante mexicano es ser relajiento, hacer las cosas al último momento y "al ahí se va" (si se toma un tiempecito para hacerlas), mostrar siempre "weba" (que difiere del real cansancio y de somnolencia por estudiar arduamente), y que siempre busca el mejor pretexto para hacer otra cosa que sea distinta a estudiar y que le ayude a perder el tiempo. Una tendencia real de nuestra actualidad, es aquella donde los estudiantes jóvenes que van a la escuela tienen la finalidad de que sus madres no les estén chingando inviten constantemente a hacer labores domésticas u otras cosas productivas y útiles.

Todos estos argumentos en contra no son para atacar a cualquier estudiante que lea esto, es para despertar un poco el interés por sí mismo y a la vez por los demás. Investiguen, lean (costumbre muy perdida hoy en día), asegúrense de que lo que escuchan y ven sea verdad. Aprendan a ser unos buenos estudiantes; tomen en cuenta que los profesores que son pésimos guiando al alumno, de seguro llegaron a su puesto por el método multi-aplicable "viva México", y si se quejan de ellos, no sean como ellos.

Si sus padres no son un buen ejemplo, tómenlos como mal ejemplo. Si todos hacemos nuestro trabajo en forma, de buena manera y bien hecho, tengan por seguro que la sociedad misma se verá beneficiada.

Hay profesionistas que aún terminando la carrera, como fueron secretarios o botarguitas y le caían bien a algunas personas (que,  como les seguían el juego, les pasaban tareas, prácticas, exámenes, etc.), trabajan en áreas distintas a su carrera y lo peor de todo es que terminan siendo unos parásitos sociales que muchas veces viven de nuestros impuestos o son tranzas en lo que hacen.

También existe la gente apática, que por cualquier cosa se desanima y cae en el conformismo, totalmente out. Es malísimo para nosotros y para nuestra sociedad el conformismo, pues gracias a éste es que queremos todo peladito y a la boca o nada. Así que las personas que manejan nuestra sociedad aprovechan y nos dan lo que les da su regalada gana.

Aprovechemos las oportunidades de educación y luchemos por ellas, unámonos y dejemos de lado a los Ingeniebrios, Licenciosos, Matasanos, Nacos, Jodidos, Hippies, Fresas, Alzados, Burros, Pumas, Persignados, Aleluyos, Feos, Torpes, Tetos, Flacos, Chaparros, etc.

Por eso les invito a que seamos mejores ciudadanos y mejores estudiantes; leamos, escribamos, informémonos, tratemos de hacer las cosas lo mejor posible (pero que de verdad sea aplicado todo nuestro potencial), no seamos conformistas y querramos todo gratis y sin consecuencias, responsabilicémonos y tengamos en cuenta que podemos llenarnos de satisfacción y autorrealización por medio de nuestros logros.

Está bien expresar nuestra opinión, pero sin esfuerzo y dedicación chingarle, no vamos a lograr gran cosa; dejemos de ser paleros, conformistas, huevones y cerrados, hay que estar bien con nosotros mismos y estaremos bien con los demás.

Ya sé que parece texto extraído de librejos de auto-ayuda de Paulo Cohelo, pero hay que hacerlo por nosotros, pues todos somos y conformamos un país.